Luz y sombra en mi camino, como Flans dice

Alguien muy importante para mí tiene en su nick de messenger "Mientras más obscuridad hay, más luz se rebela", y, como casi todas sus frases celebres ésta está atiborrada de razón.

En esta época de obscurantismo en mi vida me he topado con lecciones de valor incalculable y como soy bien compartida pues ay les van:

• La vida no se suma. Lo que nos pasa son situaciones independientes, cada una con su valor en un momento determinado, si lo sumamos nos hundimos fijo. Mejor guardar la calculadora al cabo ya ni sabemos hacerlo mental.
• No somos tortas de jamón. A los seres humanos no se nos puede sacar la cebolla (o cualquiera que sea el ingrediente que no nos guste), somos lo que hay y punto. Si hay modificaciones se hacen desde dentro y por voluntad propia. Amar es renunciar a querer que el otro cambie.
• La ruta más corta es la humildad. La satifacción profesional, familiar, personal, de pareja, etc. llega cuando somos capaces de asumir que no somos perfectos, que no lo sabemos todo y sobre todo cuando reconocemos que cada persona que toca nuestras vidas es un maestro.
• Se vale tener miedo. Lo que no se vale es no aceptarlo, el miedo bien canalizado puede ser motor de cambio.

Todavía estoy digiriendo estos y algunos otros veintes * que han ido cayendo estos días pero estoy segura de que de ésta salgo mejorada, porque así ha sido siempre, porque el valor de la vida está en caerse, levantarse y corregirse a uno mismo cada vez.


*para los lectores españoles, caer el veinte: cuando una moneda de 20 centavos cae a la caja del teléfono público. En méxico lo utilizamos para decir que nos damos cuenta.