martes, 10 de mayo de 2011

Sumas y restas

Criticar por criticar, dice Alaska en una canción de Fangoria. A veces siento que en México nos comportamos como adolescentes, que llevamos la contra a todo. Si dices porque dices y no dices porque no lo haces. Nos quejamos de los precios, de los servicios, de la inseguridad, de tantas y tantas cosas. Pocas veces logramos unirnos para mostrar esta inconformidad y menos veces proponemos una solución.

El domingo seguí los pasos de un poeta víctima de la guerra que vive nuestro país, lo seguí porque su voz me pareció serena y quería escuchar lo que tenía que decir. Lo hice también porque creo que mientras más grande la convocatoria más relevantes son las palabras. Porque hoy, más que nunca, hay que sumar. Criticar, porque sí, resta.

Se vale no estar de acuerdo, se vale opinar diferente pero no se vale hablar sin haber escuchado, sin argumentos.

El 12 de marzo de 2004, un día después de los atentados, 2.3 millones de personas salimos a la calle en Madrid -más de la mitad de la población de la ciudad- a mostrar nuestro repudio al asesinato de 211 víctimas. Ese día, dice Lovely Rita, Madrid se hizo más ciudad.

Este país tiene 40 mil víctimas, esta ciudad más de 20 millones de habitantes y sólo 90 mil personas (según las autoridades) llegamos al zócalo de la ciudad de México el domingo 8 de mayo. No me salen las cuentas.

A los muertos hay que honrarlos, los duelos hay que vivirlos y el dolor hay que atravesarlo, sólo así podemos dar el siguiente paso.

Javier Sicilia está haciendo su duelo y con él, muchos otros hacen el propio. Que México tome de este duelo lo que necesita pues sólo se puede tomar de donde hay. Vámonos poniendo de acuerdo, ya es hora.